Se trata de pequeños roedores que requieren cuidados sencillos, y si tu problema es el espacio no necesitas un gran lugar, sólo el que ocupará su jaula  (más un pequeño espacio cerrado y seguro donde lo puedas soltar un ratito mientras le limpias su casa)

Si ya están decididos prepara la casita en la que va a vivir, es importante que en su jaula tenga un comedero pequeño, un recipiente con agua, maderitas para roer, una rueda para correr, o distintos escalones o túneles por los que andar y entretenerse, las hay de 2 pisos ideales para estos pequeños inquietos. Les encanta corretear y también pasan largas horas durmiendo. El hámster suele tener hábitos nocturnos, es decir que duermen más de día y juegan de noche. Es importante que la jaula esté ubicada en un lugar ventilado de la casa, donde no le dé el sol directo ni las corrientes de aire. Su salud se refleja en mantener limpia su jaula y en cambiar periódicamente las virutas de madera del fondo, que si bien son un sustrato absorbente debemos mantenerlo libre de heces. Los hámsters no necesitan bañarse, se limpian solos.  Debes alimentarlo regularmente, una vez al día y cuidar que tenga agua fresca y limpia.

Si tus niños te lo piden es importante que sepan que su ciclo de vida no es muy largo, viven entre 3 y 5 años aprox., pero es ideal para ellos porque son animales muy activos y simpáticos que hacen piruetas y son una gran compañía. Se adaptan y encariñan muy fácilmente.  

La comida de los hámsters es bastante barata y duradera, suelen vender mezclas ya preparadas de acuerdo al tipo de hámster: mezclas de cereales, semillas y frutos deshidratados. También puedes ofrecerle fruta como manzana, pera y verduras como zanahorias. Suelen vender maderitas o juguetes de roer para que desgasten sus dientes.

Atención: es importante tener uno solo ya que se reproducen muy fácilmente!