Adoptas tu primera mascota y todo es juegos, cariño y felicidad. Pero al poco tiempo un enemigo silencioso comienza a acechar tu alegre rutina: ¡pelos por todos lados!

Dependiendo de la época del año tu mascota cambia el pelaje y esto puede generar una afluencia aún mayor de pérdida de pelo que se deposita en tus mantas, ropa y muebles. De cualquier modo, mes a mes es muy probable que en menor o mayor medida siempre te encuentres con algo de cabello de tu perro o gato en lugares indeseables. Más aún si tienes una mascota de pelo largo.

Además, algunas condiciones de salud pueden agravar la pérdida de pelo, y requerir de medidas veterinarias y de limpieza extras para lidiar con ello.

Entonces, ¿cómo sobrevivir a la marea de pelo sin morir en el intento?

Te compartimos 5 métodos fáciles y efectivos.

  1. Aspira tu casa: aunque resulte evidente, a veces por falta de tiempo o de rutina nos olvidamos de tomar esta medida elemental. Aspirando tu casa con frecuencia resolverás el 80% del problema, retirando el pelo de superficies de apoyo y de descanso, además de eliminarlo también de pisos y espacios escondidos. De paso, también contribuyes a la higiene general del hogar.
  2. Un trapo húmedo por las superficies: trapos de microfibra apenas húmedos ayudan en buena medida a retirar el exceso de pelo y suciedad de ropa y otras prendas como sábanas. Puedes reservar un trapo sólo para esta tarea, de manera de evitar pasarlo por otras superficies.
  3. Asea a tu mascota con frecuencia: si se trata de un gato, con pasarle un cepillo periódicamente bastará para retirar exceso de pelo de recambio. En el caso de un perro, baños con champú veterinario una vez por semana idealmente ayudan a mantener la higiene.
  4. Desinfecta tu casa: además de retirar el pelo que se ve, en ocasiones suciedad microscópica puede afectar distintos rincones de tu casa. Tu mascota lleva encima bacterias y a veces incluso parásitos. Por eso, no te olvides de desinfectar periódicamente con bicarbonato o cloro espacios en donde tu perro o gato duerma o descanse muchas horas al día.
  5. Cinta adhesiva para los lugares más complicados: si estás apurado o tienes un compromiso importante y notas que tu vestido, suéter o pantalón favorito viene cubierto de pelos… ¡la solución mágica! Aplica cinta de pegar sobre tu prenda y al retirarla notarás que el lado del pegamento se lleva adherida buena parte del pelo que te avergonzaba. ¡Como nuevo!